1 de enero del 2018
Hay quien cree que ganar kilos en Navidad es una tradición tan arraigada como comprar regalos o adornar árboles. Las múltiples comidas de celebración a las que hay que asistir y los dulces típicos de estas fechas son los encargados de romper el ritmo y costumbres habituales, desequilibrando el consumo calórico.
Una puesta a punto debería incluir la combinación de tres estrategias: reducir el total de calorías, seleccionar el tipo de calorías y practicar 30 minutos de ejercicio diario.
Para ser prácticos y conseguir perder esos dos kilos de promedio que se ganan en Navidades es conveniente:
La selección del tipo de calorías es muy importante. El peso ideal no es sólo un asunto matemático, porque a igualdad de calorías hay que buscar alimentos ricos en nutrientes y considerarlos en combinación con otros para alcanzar un equilibrio entre proteínas, hidratos de carbono y grasas.
Es conveniente suprimir la mantequilla y la mermelada y limitarse a tomar un café con leche o una infusión con una pieza de fruta y una rebanada de pan corriente o integral. También se puede sustituir el café con leche por un yogur desnatado.
Es aconsejable una fruta como tentempié. Nos aportará vitaminas y minerales y apenas calorías. Las mejores opciones son manzanas y cítricos.
Se puede tomar lo mismo que en el desayuno, pero sin el pan.
Se puede beber el agua que se desee, así como infusiones tipo manzanilla, poleo menta, tomillo, etc. Son también muy convenientes los zumos de frutas, especialmente el de naranja o limón, pero no envasados, porque siempre llevan azúcares añadidos.
El azúcar hay que olvidarlo temporalmente. La cucharadita de azúcar para endulzar el café con leche puede sustituirse por un edulcorante.
No es necesario apuntarse al gimnasio. La solución más sencilla es caminar 30 minutos al día. Le ayudará a quemar algunas calorías, pero sobre todo es bueno para el corazón, que agradece el ritmo de esfuerzo constante de un ejercicio suave y sin sobresaltos.